Estabamos en clase para un examen de historia y como no estaba la profe, le toco vigilarnos a un empleado. Yo tenia preparadas 3 pekeñas chuletas y las saque nada mas empezar. El vigilante no quitaba los ojos de mi mano nada mas salir del bolsillo y justo cuando iba a levantarse puse una cara despistada, como si me hubiera olvidado de algo y entonces meti las manos en la moxila, cogi un boli rojo y deje las xuletas y como habia tanta cosa y era tan pequeñas era imposible encontrarla 🙂 esa fue mi hazaña