El cambiazo

Una opción para realizar coping de una manera totalmente vanguardista es el viejo truco del cambiazo, pero el único inconveniente que puede tener es que os pillen la hoja antes de realizar el cambio, así que aquí os escribimos algunos pasos a seguir:

Requiere mucha experiencia y os avisamos de que tiene un alto nivel de riesgo por lo que debes cumplir una serie de requisitos para poder realizarlo. En primer lugar necesitas el examen que va a caer (suele resultar una tarea un tanto peligrosa y dificil) y en segundo lugar has de hacerte con hojas oficiales de tu instituto. Este era un truco muy utilizado hace tiempo, pero recientemente la Federación de Bedeles Ispañola (FBI), que se las saben todas, han puesto al corriente al Ministerio de Educación y Chuletas y se ha implantado el sello en cada hoja. Con todo esto el cambiazo ha perdido adeptos en favor del todopoderoso imperio de las chuletas informatizadas.

El método del cambiazo

Creemos que con esto ya hemos conseguido persuadirte, pero si eres un incondicional y quieres jugarte el curso con este método, aquí van unas pautas de orientación:

1º) Hazte con un buen taco de hojas del instituto, evitando doblarlas o dejar alguna señal de manipulación.

2º) Hazte colega del alumno ayudante del profesor en cuestión e invítale a unos bocatas de tortilla antes de lanzarle la oferta: “SI ME CONSIGUES EL EXAMEN TE DEJARÉ DE CANUTEAR EN CLASE”. Ante semejante proposición, el ayudante saldrá corriendo al despacho del profesor y te traerá el examen envuelto con un lacito y con aroma a frutas.

3º) Contesta a las preguntas del examen en las hojas que has conseguido intentando sentirte como si estuvieras en el aula. Es fundamental que cometas los mismos fallos de ortografía y hagas los mismos tachones que en condiciones normales. Si le entregas a la profesora el examen perfectamente alineado, subrayado y perfumado, la cagada está asegurada.

4º) Entra en clase nervioso, preocupado por lo que puedan poner, pregunta a la gente y, si puedes, sal a vomitar al baño. Así no darás señales de alerta.

5º) Coloca en tu cajonera una carpeta o, en su defecto, apuntes que no tengan nada que ver con el examen y coloca cuidadosamente debajo de todos ellos el examen preparado preocupándote de que estén alineados y sobresalgan lo justo para poder cogerlos rápidamente.

6º) Reza tres Ave Marías. Tres Padre Nuestros pueden ser también suficientes.

7º) Estudia los movimientos del profesor a lo largo de la clase. En el momento en el que pase junto a tí en dirección opuesta a la que tu miras, saca el examen con un gesto natural y tranquilo y colócalo sobre el papel de examen anterior. Es importante que antes de todo esto hayas escrito algo en la hoja original. No tiene por qué ser nada relacionado con el tema, puedes escribir sobre Primo de Rivera, tu perro Milú, o los tipos de pedos según su longitud de onda, lo importante es que el profesor te vea escribir.

8º) En otro momento preocúpate de guardar en tu cajonera el examen no válido y, seguidamente, pon cara de agobio delante del profesor, y cara de Póker ante tus compañeros.

9º) Si entregas el examen y has conseguido hacer la jugada. Envíanos tu nombre y dirección y te incluimos en el Club Chuleting en grado de Rector. AQUÍ